domingo, 12 de agosto de 2012
No hay diferencias.
Creí que eras diferente, que me querías, que no eras como los demás, que no tratabas así a todas, pero como siempre, me equivoco. Me tratas igual a mi que a las demás, pero yo me enamoro como una tonta. Joder, si es que soy gilipollas. Si es que no sé ni porque escribo sobre ti, ¿desahogo? No, las palabras no ayudan, solo hacen que recuerde. Me debería dar igual, pero no lo hace, joder vaya error. Pero que voy a hacer, es lo que hay, y lo hecho, hecho esta, y no se puede cambiar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario