Sin motivación.

La soledad eso es lo que quiero, paso de malas compañías y de silencios nauseabundos, quiero poder decir lo que pienso sin ser juzgada. Quiero poder ser libre, poder expresar mis pensamientos sin ser tachada de borde, antisocial o decir que miento. Quiero poder expresar mis sentimientos, decir que no te aguanto y no tener que arrepentirme. Quiero poder sonreír y llorar cuando quiera, quiero hablar sin tener miedo, quiero ser realmente feliz y no sufrir por ello. Puede que me pudra en la soledad por la necesidad de compañía, pero prefiero pudrirme sola que pudrirme en silencio. Solamente, quiero ser libre.

Idioteces que escribo.

 Me asome a la ventana, esperando ver algún cambio en tanta monotonía, creo que es un caso imposible. El viento era suave, las nubes iban circulando por el cielo azul, todo era precioso, y de pronto, apareció lo que más ansiaba, la inspiración. Me dirigía hacía el ordenador para saciar mis ansias de escribir, pero como siempre tan oportuno, el teléfono. Y sinceramente, estaba enfadada porque sonará.


-Hola Ari, vamos a ir el grupo al cine, ¿te vienes?


+No.


- Venga, vente tía, no seas aburrida.


+ Que no tío, voy a escribir un rato.


- Pasa de la escritura, no te va a servir de nada, y lo puedes hacer otro día, venga vente.


+¿Sabes el tiempo que hace que no tengo inspiración para escribir?, pero que me consumían las ansias de hacerlo, y ahora, que tengo justamente unos minutos para hacerlo, que tengo tanto la inspiración como las ganas, vienes tú e intentas apartarme de todo esto por una simple tarde de cine con unos chavales que no aguanto. Pero es cierto, se me olvidaba, debo ir porque sino mientras no estoy me tacharéis de imbécil, de aburrida y os inventaréis demasiados rumores sobre mi porque sabéis que no los aguantaré.


- Sabes que somos tus amigos y no haremos eso, Ari...


+ Tío, sabes que es justamente como lo estoy diciendo. Y lo sé porque lo he vivido varias veces, sino, ¿qué paso con todos esos capullos a los que tengo que llamar amigos cada vez que no viene a una de esas absurdas reuniones que os empeñáis en hacer cada semana?


- Ari, no exageres, nos conocemos desde hace demasiado tiempo, y tú estás tan harta como yo de todo, pero somos tus amigos y...


+ ¡Calla! No digas que estás tan harto como yo de toda esta mierda, no te puedes imaginar lo que pasa por mi cabeza, no sabes lo que es vivir sintiéndote una pieza más que no encaja en toda esta sociedad, pero como vas a saber eso, si tu eres popular, nadie te insulta porque te tienen miedo, y no porque seas agresivo ni violento, sino porque tu eres de esas personas que con decir dos palabras están todos a tu disposición, todos creen lo que dices, pero, haces un mal uso de ese don. ¿Sabes para que lo usas verdad? Para crear rumores, para destruir la vida de todas tus ex, de todas esas personas que te han llevado la contraría, que te han dicho que no, en eso utilizas un maravilloso don. Y ahora, querido amigo, ya puedes destruirme.


- P... pe... pero Ari, joder, yo te creía mi amiga, tanto tiempo confiando en ti, y ¿ahora te atreves a juzgarme así? Tú me conoces, ¿¡Cómo puedes pensar eso de mi!?


+ Es por eso, ¿todavía no lo entiendes? Porque te conozco digo todo eso, porque sé como eres, sé que para ti la vida es totalmente perfecta, que tu mayor problema es como joder la vida a ese ''capullo'' que no te ha sonreído cuando lo has saludado. Sé que ahora estarás furioso conmigo, y la verdad, no esperaba menos de ti, también sé que todos esos que eran ''mis amigos'' ya no lo serán, pero, solo yo sé que necesitaba decir lo que pienso de una vez por todas.

- ¡Yo no soy así!

+ ¿A que molesta cuando te dicen la verdad? Es lo que tiene ser sincera, que no le vas a caer bien a todos, bueno, más bien a nadie. Bueno, como te he dicho antes, me voy a escribir, que las ansías de escribir no me las va a quitar nadie. Adiós, capullo.


- ¡Pe...pero que zorra! Me ha colgado, está va a ver quién es Aday Robles, chicos, vamos.


Continuará.

La Luna.

Tú, eres brillante y especial, eres lo que muchos querrían alcanzar, eres una mortal poco valorada, estás siempre a la sombra de tu hermano el Sol. Tú eres la que me acompaña en las noches melancólicas, gracias a ti vale la pena mirar el cielo. Como echaba de menos todas esas noches en las que te veía por mi ventana. Tú fuiste quien presencio tantas promesas que se han perdido entre mis lágrimas. Tú fuiste quién puedo oír mi llanto apagado por el silencio. Tú fuiste quien no te has ido, tu eres la que ha estado junto a mi todas esas noches en las que la soledad me dejaba helada.
Ya puedes estar llena o medio vacía, yo ansió tu compañía. Daría mi vida por pisar tu superficie, pero es algo que uno no puede permitirse. Seas lo más bello, o lo más horrible, nadie te valorará lo suficiente.
Tú has sido la musa de muchos, para mi has sido un recuerdo. Eres el recuerdo de todas esas historias sin nombre que escribí en un momento de locura, eres el recuerdo de todos esos libros que nunca olvidaré... Tú, eres mi paisaje favorito.  

Mi imaginación.

Mi imaginación es lo único que me gusta de mi. Ella es la que me hace volar, la que me puede sacar una sonrisa con solo una escena. Mi imaginación es la que me hace creer que un mundo mejor es posible, donde la vida sea maravillosa, pero no perfecta. Mi imaginación es la que me hace relajarme, es la que hace que me pierda en un mundo especial, en mi mundo. Allí puedo imaginar que él esta a mi lado, que el que era mi mejor amigo no me guarda rencor, que hago maravillas con un micro, que las rimas se deslizan sobre la base, allí puedo imaginar que mis sueños se harán realidad, puedo imaginar que tengo futuro.
Mi mente desde que me pongo a imaginar sin quererlo se prepara, me desenfoca la vista, y cuando pienso en ellos, en mis amigos, se desliza una sonrisa por mis labios. Mi imaginación, es lo que me hace luchar por un futuro mejor, pero también es lo que me hace odiar el presente.